¡Bruselas huele a chocolate!

Regresé de Bruselas con un constipado importante que me ha tenido dos días con fiebre y voz de camionero, aparte de dolores y mareos pero ya estoy con fuerzas otra vez. La verdad es que ir sola hasta Bruselas ha sido toda una aventura y no me ha importado estar dos días sin salir de casa recuperándome. Caminar a mis anchas por el aeropuerto nacional sintiéndome una guiri total, coger el tren hasta el centro de la ciudad con la gran maleta que llevaba… y encontrarme con Inés! Somos incapaces de quedar en Madrid y decidimos vernos en Bruselas…estamos como demonios! (la última coletilla que se me ha pegado XD) Gracias por esa llamada repentina que hizo que preparara este viaje improvisado en cinco días!

Lo mejor fue encontrarnos a Claris en la Grande Place! Fue genial! Es un lugar increíble, parece que te trasladas a una época y a un tiempo anterior de soldados y caballeros con corcel dando su vida por princesas…De Bruselas me quedo con sus calles llenas de casitas de colores, con el olor a chocolate, con los gofres y con la cereza de frambuesa; y también con esa caminata de diez horas que nos dimos las tres!

Clara fue la mejor guía, aunque no se supiera el nombre de ninguna estatua por las que le preguntaba…jiji! Muchísimas gracias por todo, la próxima cita es Zaragoza 2008,con escala en Madrid estas Navidades! Un besote muy fuerte para las dos!